Cuando miro el cielo gris de Lima, a veces me entra la ansiedad y la necesidad de ver un poco de sol. Pero a veces cuando el sol calcina la piel y el calor humedo del verano no parece irse nunca es que reflexiono sobre la necesidad de balance en la vida. Sin lo negro, no veriamos lo blanco. La famosa ley del Ying y Yang, el estudio de la bipolaridad de las cosas. La comprobacion de que todo se complementa, lo bueno y lo malo. lo dulce y lo agrio, lo frio y lo caliente.
Y es asi que se, que luego de un cielo gris, vendra un cielo azul, luego de la tristeza vendra la risa. Y la vida continuara...
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2 comments:
Yo también amo los días claros con luz solar, me hacen sentir mucho mejor
bsos de esposa primeriza y Recién casada
Ya pronto llegan esos dias Fiore. Saludos y gracias por la visita..!
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