Prometi no quejarme: una recomendacion

Al regresar a vivir en California, prometi no quejarme de no poder hacer esto o aquello o de no poder comer esto o lo otro, asi como trate en lo posible de no hacerlo en el Peru, cuando inevitablemente, la nostalgia ganaba y pensaba en la vida que habia dejado en California.

Pero este post, mas que una queja, es una recomendacion.  Pues pienso, que seria un pecado mortal no caer en este lugar:  Dolce Capriccio.

Y no, no tengo vinculo alguno con los due~os, ni intereses economicos algunos, mi recomendacion es hecha de corazon pues pienso que merecen realmente reconocimiento por el esmero que tienen en su local.  Esta pasteleria, que en los ultimos dias se ha vuelto muy trendy, tiene unos pasteles increibles.  No he probado las bebidas salvo algunos capuccinos deliciosos, pero parece ser que su dedicacion y esmero los estan haciendo muy populares.

El pastel en la foto, es un crocante de chirimoya.  No capture la salsa de chocolate liquida que acompa~a el postre, pero son el complemento ideal.

El local queda en Miraflores, en la calle Dos de Mayo con Arica.  Ojala les guste tanto como a mi.